Histórica despedida de la Leyenda en Pontevedra
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GUARISMO DEL OCHO
Pontevedra prensentaba un casi lleno en los tendidos, con un gran ambiente. La terna la formaban Morante de la Puebla, El Juli y Manzanares que se midieron a un gran encierro de Santiago Domecq. Morante dio la cara y la cruz en la tarde, al primero le cortó una oreja y al cuarto lo alivió enfadando al respetable. El Juli desorejó al primero de su lote y cortó una a su segundo entre la aclamación de quedate del respetable. Manzanares no tocó pelo.
Morante se enfrentó a un toro noble de Santiago Domecq con un buen toreo de capote y momentos de inspiración muy bien rematados con la espada que le valió una oreja.
El Juli realizó una gran faena ante un gran toro de Santiago Domecq. El torero madrileño tiró de recursos de su tauromaquia, recuperando las lopecinas, tuvo momentos brillantes por ambas manos. La plaza le entregó las dos orejas del tirón entre gritos de Juli quédate.
Manzanares tuvo sus mejores momentos ante el tercero, un encastado toro de Santiago Domecq, por el pitón derecho, pero la espada no fue efectiva. Saludó una ovación desde el tercio.
Morante escuchó una bronca torera ante el cuarto con el que abrevió.
El Juli toreó al ralentí con el capote y cuajó de forma sensacional al astado por ambas manos. Un buen astado al que le realizó una gran faena que brindó a Manolo Lozano y al que cortó una oreaja con una fuerte peticion de la segunda ante un enloquecido público, totalmente emocionado en Pontevedra que le siguió pidiendo que se quede.
Manzanares cuajó por el pitón derecho al extraordinario sexto de Santiago Domecq. Tuvo momentos de encaje y gusto por esa mano pero falló al primer intento recibiendo, logró una estocada fulminante al segundo intento.
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